Ayer fui al cine a ver una película que estaba esperando como agua de Mayo. Micmacs, el ultimo trabajo del frances Jean-Pierre Jeunet, más conocido como el creador de la marivillosa y exquisita Amelie Poulain. La cinta esta bien, no es una obra maestra pero se deja ver. He de reconocer que al principio me dormia enormemente, demasiado lenta, demasiado tiempo sin que ocurriese nada de nada. Pero de repente en un punto determinado la historia coge carrerilla y empieza a correr, y correr, y correr... Resumiendo, que al final te acaba enganchando todo lo que no te habia enganchado anteriormente.
La critica la ponia de pelicula vulgar, yo creo que no es asi, posiblemente el hecho de que Amelie dejo el liston muy alto haya hecho que la gente se esperase una cosa parecida y finalmente les ha decepcionado. Pero sinceramente a mi no me parece nada vulgar, eso si, si esperas otro Amelie mejor que no pagues la entrada del cine.
El guion como dije anteriormente en ocasiones me aburria, creo que esta poco trabajado, un trabajo demasiado vago y flojo, aunque aun asi la historia acaba por convencer.
La composicion de planos me han parecido maestros, muy al estilo de Jeunet, todos conocemos los tipos de plano con los que ha trabajado anteriormente, ya sea con Amelie, Delicatessen o Largo domingo de noviazgo. Tambien cabe destacar la fotografia, muy cuidada y a la par exquisita. Esto ultimo ha sido algo que me ha gustado enormemente. Tambien el montaje me ha parecido grandioso. Sin embargo hay ciertos detalles en los que hubiese pegado un tiron de oreja a Jeunet, como por ejemplo el abuso excesivo de efectos especiales digitalizados (vease el vapor del radiador o el vaho que sale de la boca de la contorsionista) y la falta de una voz en off como ya hizo en Amelie. Creo que la voz en off hubiese dado mayor importancia a la historia.
Tambien he echado de menos, aunque esto ya es mas a titulo personal que otra cosa, la presencia de Yann Tiersen, y aunque si que hay ciertos recuerdos a el durante la cinta, su presencia aun se echaba mucho en falta.
Sin mas que decir, y aunque parezca que haya destripado y criticado en exceso la pelicula, he de decir que me ha gustado mucho, y que recomiendo que se vea en la gran pantalla, aunque sea solo para poder apreciar en toda su plenitud del juego de colores con los que juega el maestro Jeunet.
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